miércoles, 9 de enero de 2008

FUTBOL: Nuevo entrenador de Melgar sabe lo que quiere


Se le notaba emocionado, pero también firmeza en sus palabras. Gustavo Adolfo Bobadilla, volvía a su segunda tierra como él siempre decía y a su casa Melgar, ya va hacer 15 años desde que dejó a los rojinegros, sin cumplir una promesa que era campeonar.
“Yo deje muchos amigos aquí en Arequipa, y por eso amigos y por toda la ciudad estoy volviendo aquí. No me sorprende esta bienvenida, porque cuando se deja buenos amigos esto puede pasar” fueron las primeras palabras del paraguayo.
Bodilla, reconoció que su llegada al FBC Melgar se debían a los amigos. Ante la pregunta que se le formuló que unos de eso amigos que hacía posible su llegada e era el periodista Pierre Manrique, afincado en Argentina, sostuvo que sí, que influyó para poder estar aquí.
También sostuvo que está al tanto de las contrataciones que se hacen, “conozco a los jugadores, se quienes son y estoy seguro que podemos hacer cosas interesantes. Vamos a formar un grupo muy compacto y que tendrá un nivel altísimo”
Finalmente comunicó que la contratación de extranjeros se vera después. “Hay confianza en hacer las cosas bien, y pienso que lo haremos teniendo como base la honestidad y lealtad con el club”. Esta noche Gustavo Bobadilla se reunirá con la directiva y exponer el plan de trabajo.

FUTBOL: Bobadilla el amigo que un día volvió


Terminaba de decir una oración y hacía una pausa, y de pronto le “llovía” otra pregunta. Una de esas interrogantes la hizo el periodista Hernán Valencia Bolaños, del diario El Bocón y del Programa Minuto 90, la respuesta me sorprendió: “Claro hermano, Hernán…”
El mismo hombre de prensa se asombró, después de varios años se recordaba de él.
“Bueno cuando el estaba en Melgar, te hablo de los años de 1992 y 1993, por la relación del trabajo, es decir periodista y deportista, nació una amistad. La verdad me sorprendió que me reconociera (se ríe). La última vez que nos vimos fue en el 2001 cuando se desarrolló el Sudamericano de la Sub 17 en Arequipa, en aquella oportunidad me regaló una camiseta de la Selección Paraguay” comentó Valencia Bolaños, que por esas cosas de la vida y sobre todo por el fútbol, esta tarde, nublada y fría le trajo a un amigo que se había ido, pero un día volvió.

FUTBOL: Llegó Bobadilla a quitarse la espina y saldar una promesa.


“Vamos, vamos Bobadilla que contigo vamos a campeonar”. Así era la letra de la canción que empezaron los barristas del FBC Melgar, cuando a las 14:18 horas de esta tarde el avión de la empresa Sky Airline aterrizaba en la pista del aeropuerto Alfredo Rodríguez Ballón, trayendo al ídolo, que hoy es el nuevo entrenador, Gustavo Adolfo Bobadilla Orrego.
Vestía un saco claro (crema), pantalón negro y camisa celeste rayado. Bajó del avión las preguntas era, “donde está”, “¿Quién es?”. Avanzó unos pasos, los canciones que entonaban los barristas eran más fuerte, de pronto levantó la mano y la cerro, mostró un puño que significaba la garra guaraní, esa garra que tanta falta hace ahora a los “rojinegros”, para volver a los principios de los noventa cuando eran protagonistas de los torneos, cuando luchaban los primeros lugares, ese año 1992, donde Bobadilla era el golero y capitán del equipo.
Después Bobadilla, pasó por su equipaje, se hizo esperar, ya había pasado más de media hora, cuando Alberto Cisneros, periodista de Radio Programas del Perú, sostuvo guardando su celular. “Me acaban de informar que Bobadilla están mal del estomago y por eso la demora” y todos los hombres de prensa sonrieron.
Luego apareció, se quitó el saco y mostraba una camiseta del Melgar, la que según dijeron es de la presente temporada. El directivo Gustavo Chávez, le dio la bienvenida, junto a Samuel Zevallos. Ni bien que terminó se saludar, Bobadilla fue presa del bombardeo de preguntas de los periodistas. Tras esto se dirigió a la barra que no dejaba de cantar, les dijo que para conseguir el objetivo de campeonar hay que tener mucha fuerza y trabajar arduamente y que todos tienen que estar unidos. Luego las firmas de autógrafos, finalmente al auto de Zevallos, rumbo al hotel, estoy seguro que en el trayecto viendo la ciudad, habrá pensado y se habrá dicho “ya estoy aquí, ahora a quitarme la espina que me molesta”.

FOTOS LLEGADA DE GUSTAVO BOBADILLA






Soy periodista y me gusta serlo y pienso que: En esta vida hay de todo, periodistas que dicen que no se casan con nadie, pero que se acuestan con cualquiera, lastima que sea impotente.