¿Usted es el periodista que siempre viene a la UNSA, verdad?, me preguntan dos jóvenes y una señorita, que dicen ser estudiantes agustinos y que se muestran preocupados porque hasta ahora no pueden usar las instalaciones del complejo deportivo Ho Chi Minh.
Los jóvenes, que no deben pasar de los 20 años, se disculpan de no poder identificarse y me invitan a acompañarlos a visitar el Ho Chi Minh. Cuando llegamos me cuentan lo que había antes de que la UNSA firmara el convenio con Perumin para el desarrollo de la Convención Minera del 2015.
“Antes de marzo del año pasado aquí había la Cuna Jardín y a su lado una cancha de vóley, más allá una de básquet y para el otro extremo, que da a la avenida Venezuela, había una losa de fulbito y dos de vóley, y claro, la cancha de fútbol con su pista para el atletismo (de tierra)”, cuenta uno de los estudiantes varones.
Mientras que la dama agrega: “También existía las tribunas, según me cuentan, para 500 personas, un gimnasio y oficinas donde funcionaba el Área de Educación Física”.
Los estudiantes recuerdan que cuando se firmó el convenio la promesa era que se iba a dejar tal como lo encontraron y hoy eso no se ha cumplido. “Solo hay la cancha de fútbol, el Área de Atletismo y una sola losa deportiva multiusos: fulbito, vóley y básquet”. Los estudiantes comentan que no solo se han perjudicado las actividades deportivas oficiales: Juegos Cachimbos e Interescuelas, sino también la parte recreativa. “Aquí veníamos a jugar básquet, a pichanguear, las diferentes escuelas hacían sus festivales deportivos, y nada de eso se puede hacer hoy, esperamos que las autoridades de la UNSA solucionen el problema”
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