La industria de gimnasios y centros de entrenamiento
deportivo de la región se ha visto afectada debido a la pandemia, ya que desde
que inició la cuarentena en marzo, estos centros se han mantenido cerrados
debido a las disposiciones dadas por el Gobierno Nacional, y aún no tienen
fecha de retorno, pese a que afirmaron que sería en la cuarta fase de la
reactivación económica.
Esta situación ya ha originado la quiebra de 20 de los más
de 120 locales que existen en Arequipa, y ha dejado sin ingresos a más de 3.000
familias cuyos integrantes perdieron su trabajo. No obstante, de continuar con
esta situación, la pérdida de empleos se agudizará.
Por ello, pidieron a las autoridades que evalúen su pronta
apertura y los consideren como parte de la solución, no del problema, puesto
que el ejercicio contribuye a aliviar algunas de las problemáticas que se viven
hoy, como es la prevención del sobrepeso y obesidad, enfermedades como la
diabetes e hipertensión, hasta rutinas para la recuperación de pacientes
postcovid, que se pueden controlar y combatir con la práctica frecuente del
ejercicio físico, señaló Christian Flores, presidente de la Asociación de
Gimnasios de Arequipa.
Asimismo, informaron que los establecimientos ya cumplen con
los protocolos de bioseguridad, y a fin de salvaguardar la salud de sus
usuarios los aforos en salones serán reducidos en más de un 50%, es decir, en
un aula donde ingresaban en promedio 30 personas, ahora solo estarán 8 o 10.
También cumplirán con el distanciamiento entre máquina y máquina, que será de 2
metros.
Además, la desinfeción de los equipos será cada vez que sean
usados, entre otras medidas.
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