El presidente de la República, Ollanta Moisés Humala Tasso, hace poco anunció que al término de su mandato su gestión habrá invertido en el deporte un total de 3.240 millones de nuevos soles; además sostuvo que en el 2015 al IPD se le otorgó un total de 30 millones de nuevos soles para las federaciones, logrando duplicar el presupuesto de 15 millones. Esa es la realidad del deporte nacional desde el punto de vista económico.
Antes del inicio de los Juegos Panamericanos de Toronto, la revista Forbes, especializada en el mundo de los negocios y las finanzas, publicó cifras interesantes sobre lo que los países de Latinoamérica invertían en el deporte, donde se puede conocer que República Dominicana invirtió en este año 1.895 millones de dólares, que corresponden al impulso del alto rendimiento, infraestructura, programas de activación física, promoción, salarios administrativos y becas.
La inversión de Argentina es de 30.3 millones de dólares, sus programas estatales han permitido crear figuras en el tenis, el fútbol, basquétbol, hockey sobre césped e incluso boxeo.
Chile invirtió en el deporte 213 millones de dolares. Su presupuesto es histórico, de los cuales el 45% fue para la organización de la Copa América 2015.
La inversión en el deporte colombiano es de 169.3 millones. En los últimos años, el Gobierno colombiano ha decidido apostar por el deporte como uno de sus estandartes. Cuenta con dos embajadores maravillosos para su promoción: la selección de fútbol, que llegó a cuartos de final el pasado Mundial de Brasil, y el ciclista Nairo Quintana, quien ganó el Giro de Italia (una de las tres pruebas más importantes del mundo).
Ecuador invierte 52.5 millones de dólares. Los ecuatorianos presumen que gracias a su programa de apoyo económico, al menos 246 deportistas de alto rendimiento reciben un salario mensual que les permiten dedicarse exclusivamente a entrenar; no como hasta hace una década, cuando tenían que completar con otro oficio para obtener más recursos.
Y bueno, como lo escribí lineas arriba, en el Perú se invertirá en el deporte un promedio de 1018 millones de dólares, pero en cinco años.
Antes del inicio de los Juegos Panamericanos de Toronto, la revista Forbes, especializada en el mundo de los negocios y las finanzas, publicó cifras interesantes sobre lo que los países de Latinoamérica invertían en el deporte, donde se puede conocer que República Dominicana invirtió en este año 1.895 millones de dólares, que corresponden al impulso del alto rendimiento, infraestructura, programas de activación física, promoción, salarios administrativos y becas.
La inversión de Argentina es de 30.3 millones de dólares, sus programas estatales han permitido crear figuras en el tenis, el fútbol, basquétbol, hockey sobre césped e incluso boxeo.
Chile invirtió en el deporte 213 millones de dolares. Su presupuesto es histórico, de los cuales el 45% fue para la organización de la Copa América 2015.
La inversión en el deporte colombiano es de 169.3 millones. En los últimos años, el Gobierno colombiano ha decidido apostar por el deporte como uno de sus estandartes. Cuenta con dos embajadores maravillosos para su promoción: la selección de fútbol, que llegó a cuartos de final el pasado Mundial de Brasil, y el ciclista Nairo Quintana, quien ganó el Giro de Italia (una de las tres pruebas más importantes del mundo).
Ecuador invierte 52.5 millones de dólares. Los ecuatorianos presumen que gracias a su programa de apoyo económico, al menos 246 deportistas de alto rendimiento reciben un salario mensual que les permiten dedicarse exclusivamente a entrenar; no como hasta hace una década, cuando tenían que completar con otro oficio para obtener más recursos.
Y bueno, como lo escribí lineas arriba, en el Perú se invertirá en el deporte un promedio de 1018 millones de dólares, pero en cinco años.
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