Son los más pequeños de la Escuela de Fútbol de Menores del FBC Melgar. Ellos tienen 4 años de edad, en consecuencia son los engreídos y los que atraen más miradas del público que llega hasta las instalaciones del estadio Serapio Barra "Los Palitos".
El trabajo que se hace con estos niños es especial, muy diferente a los demás. Por ejemplo, en la víspera, se pudo observar que a cada niño se le entrega un balón adecuado para su edad. Ellos tienen que patear el esférico y tumbar los varios conos que están ubicados en el terreno de juego.
Otro de los ejercicios que los más pequeños desarrollan se da cuando sus entrenadores les colocan los chalecos en la espalda simulando ser una capa de algún superhéroe. Solo un niño no tiene esa capa. Precisamente es ese pequeñín quien tiene que salir a la carrera a tratar de quitar las capas de sus compañeritos. Es un juego parecido a la pesca pesca.
Pero lo que más les gustó a los infantes fue cuando su entrenador lanzó una pelota al centro del campo. Entonces ellos tenían que ir a la carrera hasta el balón y tratar de patear; algunos que mostraban mejor condición con el manejo del esférico, trataban de driblar. Así pasaron su mañana los "peques", quienes desde su temprana edad, ya sienten un gran cariño por la rojinegra: el FBC Melgar.
El coordinador de la Escuela de Fútbol de Menores del FBC Melgar, Juvenal Briceño, sostiene que el trabajo que se hace con los menores es especial, de motivación y lúdico. Los padres de familia salen contentos porque sus menores hijos la pasaron bien en el inicio de la práctica del fútbol.
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