domingo, 18 de mayo de 2014

La danza de los millones


El tercer planeta del Sistema Solar comienza a vivir la fiebre del fútbol, calentura que llegará a su clímax en el mes de junio cuando se inicie la máxima fiesta del balompié mundial. Brasil, el gigante de Sudamérica, será la sede, el Mundial vuelve a un continente que según los entendidos está en vía de desarrollo.
Según las últimas informaciones, la construcción del estadio en la ciudad de Brasilia al final costará 900 millones de dólares, que es financiado íntegramente por el Estado brasileño.
Mientras que el costo total por los 12 estadios será de 4 mil 200 millones de dólares, es decir, cuatro veces lo que la Fifa había presupuestado en el año 2007. Pero la fiesta completa tendrá un costo de 11 mil millones de dólares. 
Es por eso que los grupos anti Copa del Mundo organizan protestas por el exagerado gasto y no priorizar ese dinero para campañas en la lucha para erradicar la pobreza. Para los analistas sociales la única alternativa para que esta ola de protesta no crezca durante el desarrollo del Mundial es que la selección de Luiz Felipe Scolari mínimo llegue a disputar la final; no quieren imaginar qué pueda pasar si el equipo es eliminado en la primera fase.
El fútbol es como una religión en Brasil y en gran parte de Latinoamérica; según Unicef, la pobreza infantil en América Latina alcanzaba en 2007 a 80 millones de menores de 18 años con tendencia a subir esa cifra. ¿Vale la pena gastar tanto dinero por un certamen deportivo cuando hay otro tipo de necesidades, en salud, educación en sí en el desarrollo de una sociedad? Sin duda que el fútbol a estos niveles puede cegar a todo el planeta, "pan y circo para el pueblo". Al final el Mundial es un torneo donde juegan los ricos y  los pudientes aplauden desde las tribunas; el pobre lo goza viendo por la tele.

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Soy periodista y me gusta serlo y pienso que: En esta vida hay de todo, periodistas que dicen que no se casan con nadie, pero que se acuestan con cualquiera, lastima que sea impotente.