martes, 25 de noviembre de 2008

OPINIONES SOBRE LA SUSPENSION DE PERU POR PARTE DE LA FIFA

Aquí algunas opiniones de destacados periodistas deportivos en sus respetivas columnas en sus medios de comunicación

LA PRIMERA
No hay que asustarse
Por: Ivlev Moscoso

Para todos los incendiarios que gritaban una posible desafiliación de la FIFA, ya van perdiendo piso. Porque tal como escribimos hace más de un mes, la sanción era una suspensión. Que es muy diferente al término utilizado por seudos informadores. Todas las federaciones o asociaciones que fueron sancionadas por el máximo ente rector, siempre fueron suspendidas.
Este es el término que utiliza la FIFA. Y una suspensión es una medida preventiva que puede cortar todo o en parte una actividad.
Perú no es la primera o la única federación que es suspendida. Actualmente lo está Kuwait, un país donde se juega normalmente el fútbol local, utilizando jugadores extranjeros.
Muchos comentaristas daban como ejemplo que Grecia fue suspendida siendo campeona de Europa. Pero lo que no dicen es que la suspensión duró 8 días y fue cuando los jugadores estaban de vacaciones.
A Madagascar le dieron plazo para que arregle su situación hasta el 21de febrero. Recién en marzo fue suspendida y se levantó la sanción una semana antes que jugara ante Botsuana la eliminatoria para Sudáfrica 2010 el 31 de mayo.
En Polonia, la FIFA atacó duramente al gobierno, al que acusó de intromisión política El 30 de setiembre envió una carta donde solicitaba la reposición del presidente de la Asociación de Fútbol Polaco Robert Zawlocki.
En los días posteriores, la FIFA y la UEFA se reunieron con las autoridades del gobierno polaco y llegaron a un acuerdo para realizar nuevas elecciones el 11 de octubre. Jamás fue restituido el titular saliente. Hoy el ex jugador Lato, tras ganar una elección con dos postulantes más, es el presidente de la Asociación del Fútbol Polaco.
Y para todos aquellos que decían nos quitaban los cupos para la Copa Libertadores, se deben estar jalando lo pelos. Porque hoy, los cupos peruanos están intactos. Y entrarán al sorteo sin problemas. Y si Perú sigue suspendido en febrero, jugarán bajo un permiso especial como lo hicieron otras federaciones. No hay que asustarse. Hoy juega la “U” y el fin de semana seguirá el fútbol.


PERU 21
¿Escarmentaremos?
Autor: Efraín Trilles

Era la sensación más extraña, con líneas telefónicas saturadas e inquietud en el aire. Eran horas de expectativa total, como si se viviera la antesala anticipada de un terremoto con epicentro en Zúrich y con damnificados desperdigados al sur de Tumbes y al norte de Tacna. “¿Sabes algo?”. “No, dice que mañana a las nueve”. Y más adelante: “Dice que ya, que hay un mes de plazo”. “No, no es así, pero dicen que hay un aire favorable”. Hasta que un cable de Reuters, marca legendaria como la FIFA, confirmaba las cosas: suspendidos de toda actividad internacional.
El cable, que llegó a las 4:15 p.m. a las redacciones, añade que la suspensión será levantada o confirmada en la próxima reunión de Comité Ejecutivo de la FIFA, lo que nos lleva hasta el 20 de diciembre. Desde Asunción, el colega Juan Antonio Meireles confirmaba la fecha y adelantaba que los cupos peruanos de la Libertadores estarían reservados hasta entonces. ¿Podrán los jugadores o los técnicos extranjeros desempeñarse esta noche en el ámbito de un fútbol cuya federación ha sido suspendida de toda actividad internacional?
Esa es la primera de las preguntas que se levantan a la luz de la situación. Pero hay preguntas de más peso. ¿Sirve de algo persistir en el actual empecinamiento de los voceros del Perú oficial o expiraremos nomás sin admitir que la FIFA morirá en la defensa de Manuel Burga? Ni que fuera tan difícil sentarse y constituir una mesa de diálogo. Si la FIFA mata por Burga, igual se puede aprovechar el momento para reformar el sistema actual que, curiosamente, fue modificado para que Burga perdiera (y el odiado ganó). Así que, cumplido su mandato, primaría el nuevo sistema de elección. Mesas de diálogo más densas se despejaron en el 2000. No obstante, si ante el indisoluble matrimonio Burga-FIFA nuestro jefe del IPD le antepone el autismo de quien decreta las cosas por sí y ante sí, ni un mes ni 10 nos privarán del colapso total.


PERU.COM
¿Qué ganamos con la desafiliación?
Por. Kike Giles
Absolutamente nada, todo lo contrario, perdemos todos y mucho más de lo que podríamos imaginar. Por ello me llama la atención leer varios comentarios que aplauden esta decisión de la FIFA y hasta esperan la pronta desafiliación. ¿Saben exactamente lo que esto podría ocasionar al fútbol peruano? Me parece que no.
Ni siquiera el Jefe del IPD pareciera conocer las implicancias de esto, porque en una reciente entrevista en América TV tuvo un desliz (“si nos desafilian, qué chuch…”) inaceptable. Él es uno de los personajes principales de esta historia, y no es la forma de expresarse de un problema tan serio en el que nos encontramos.
El primer paso para la desafiliación del fútbol peruano se ha dado, la FIFA decidió suspendernos de toda competencia internacional por la intromisión gubernamental en la Federación Peruana de Fútbol (FPF). Y lo peor de todo es que nada hace suponer que el grave problema que afecta al fútbol peruano tenga visos de solución, sobretodo porque los interlocutores (Manuel Burga y Arturo Woodman) han personalizado tanto el tema que ya se han convertido en una traba para solucionarlo. La terquedad de uno y el enquistamiento de otro han terminado por “suspendernos”.
Sin embargo, la gente debe saber que el problema del fútbol peruano es mucho más que un pleito entre las cabezas del IPD y la FPF, es definitivamente mucho más que eso, y la desafiliación no es la solución a dichos problemas. Hay mucha gente que está de acuerdo con una futura desafiliación porque “no quieren a Burga en la FPF” o porque “la selección no clasificará al mundial”. Comprendo y entiendo a cada uno de ellos, pero el fútbol peruano es mucho más que Burga, Woodman, la misma Federación y/o la selección absoluta. El fútbol peruano está mal por un mar de problemas (clubes poco serios, falta de divisiones menores, dirigentes poco capacitados, etc.), no equivoquemos las cosas, una desafiliación no los resolverá, sino los agravará.
Al igual que muchos de ustedes, tampoco estoy de acuerdo que Burga se mantenga en la Federación. Personalmente creo que ya cumplió un ciclo, con resultados deportivos que no lo avalan, y debería dar un pasado al costado, sin embargo, estar de acuerdo con una desafiliación no es el camino correcto para que el mandamás de la FPF se vaya. ¡No personalicemos el problema!
La FIFA, nos guste o no, tiene un estatuto que deben cumplir todos los países que se afilien “voluntariamente” a ella, y en el Perú esto no se está cumpliendo. Por otro lado, Burga fue inhabilitado por el IPD y aún así participó en las últimas elecciones de la FPF, donde fue reelegido como presidente, en un proceso electoral que para la FIFA fue válida (según sus estatutos solo ella puede inhabilitar un dirigente).
Cabe precisar que la FIFA no admite que ninguna entidad gubernamental, llámese IPD, Consejo Superior de Deporte, Congreso, etc., se intrometa en las actividades de la federación, y esto no significa que el máximo ente del fútbol mundial se “burle” de las leyes peruanas, pues nuestro país se afilió voluntariamente a dicha entidad, comprometiéndose a cumplir con su estatuto.
“Nosotros somos una organización privada y en nuestras competiciones participan los que aceptan nuestros estatutos y reglas, que contemplan cualquier situación…. Igual que yo no discuto las leyes con las que cada país se organiza espero que los gobiernos no discutan las leyes del fútbol. A veces olvidan, y quiero decir esto sin que se entienda mal o como prepotencia, que la FIFA está integrada por más países de los que tiene la ONU. Nuestra fuerza es mayor”… Esta declaración de Joseph Blatter no se refiere al caso peruano, sino cuando amenazó a España de desafiliarlo a inicios del 2008 porque el Gobierno quiso adelantar las elecciones en la federación española.
Considero que tanto el Gobierno como el IPD deben buscar la mejor solución al tema y evitar que el fútbol peruano -en su real dimensión- sea el más afectado.
¿Se soluciona el problema registrando la Directiva? En teoría sí, pero según el mismo Woodman es jurídicamente imposible y eso solo se produciría con algún tipo de amnistía, y si se diera, no es retroactivo, es decir, se tendría que hacer una nueva elección para reconocer a dicha Directiva.
¿Cuál es la solución entonces? Para salvarnos de la guillotina que significa una posible desafiliación, se podría comenzar demostrando una voluntad de diálogo, definiendo una hoja de ruta para solucionar el impasse, pero con acciones claras para que la FIFA vea que se están respetando sus estatutos y vuelva a dar el visto bueno al Perú.
Señores, el problema del fútbol peruano no se solucionará con Burga fuera de la Videna, y menos con equipos peruanos sin competencia internacional, el problema del fútbol en el Perú es mucho más complejo que ello y requiere que todos los estamentos futbolísticos se unan (realmente lo hagan) y empujen el coche hacia un solo sitio.
EL COMERCIO
La bolsa negra
La FIFA solo formalizó la inexistencia del fútbol peruano
Por Renato Cisneros. Periodista
Los hinchas se comen las uñas, se restriegan los ojos, se jalan los pelos y miran los titulares del quiosco, desconcertados, incrédulos, boquiabiertos. La FIFA nos ha bajado el pulgar. Hemos quedado suspendidos de toda competencia internacional. Somos --ahora sí-- los parias, los apestados, la última tuerca de la última rueda del último coche.
La noticia es, sin duda, una bomba, pero una bomba anunciada. La decisión tomada por la FIFA no hace sino formalizar una situación que ya existía, porque hacía bastante rato que ya estábamos suspendidos de la competencia internacional. No de manera oficial, ciertamente, pero sí de modo simbólico. Nuestra inexistencia, nuestra invisibilidad, nuestro sistemático fracaso en las ligas mayores del fútbol continental era una manera de estar sin estar. Íbamos a los torneos, pero regresábamos maltrechos. Siempre. Íbamos a las Eliminatorias, pero nuestra participación era decorativa, pintoresca. Inofensivos como rivales, pero necesarios para el sistema, éramos como el gordito mongo de la clase al que ponen al arco porque hay que completar el equipo. Nada más.
Suena tremenda la palabra 'desafiliación' (que, en rigor, está mal empleada), pero es innegable que el fútbol peruano desde hace años es un espejismo. En las últimas dos décadas todos los países de la región, menos Perú, han estado en un Mundial. Alguien podría replicar diciendo que Venezuela tampoco ha asistido a una Copa del Mundo, y aunque eso sea exacto, da vergüenza apelar a ese consuelo para mitigar la decepción de nuestro estancamiento.
Seguramente será raro no hablar en adelante de la Libertadores, de las Eliminatorias o de la Sub 20, pero algo me dice que nos merecemos esta marginación temporal. La clase dirigencial peruana ha estado (y está) formada por una enorme camarilla de oportunistas que nada bueno ha sembrado. Y todos los demás --jugadores, aficionados, políticos, periodistas y profesionales varios disfrazados de periodistas-- hemos estado un poco a la altura de esa mediocridad.
Que nadie victimice ahora al fútbol peruano porque sus actores han hecho muy poco por reinventarlo. Esta suspensión tendría que marcar un punto de inflexión, tendría que ser una lección, pero no es tan fácil: la escasez de líderes imaginativos en el ambiente de la federación hace sospechar que este solo será un hito en el calendario noticioso del año.
Que los hinchas no se escandalicen con la noticia del día. El muerto ya estaba oliendo mal. Lo único que la FIFA ha hecho es colocarlo en una bolsa negra.

No hay comentarios:

Soy periodista y me gusta serlo y pienso que: En esta vida hay de todo, periodistas que dicen que no se casan con nadie, pero que se acuestan con cualquiera, lastima que sea impotente.